sábado, 6 de octubre de 2018

Los Planes de Pensiones son una trampa saducea pensada para esquilmar nuestros ahorros.-


http://www.expansion.com/ahorro/pensiones/2018/02/09/5a7cb741e2704e5c368b45df.html
Expansión.com
Fuimos de los primeros en hacernos un Plan de Pensiones. A finales de los 80, teníamos lo que se llamaba un Seguro Colectivo que nos pagaba la empresa (como un pago en especie). A la jubilación te garantizaban 2 anualidades. Los sindicatos nos empezaron a calentar la cabeza con que no era viable porque no estaba externalizado y funcionaba como un negocio piramidal. Se nos dio a elegir: hubo quien no se quiso cambiar y siguió con su modesto seguro, y los más listillos nos hicimos un Plan de Pensiones, al que traspasaron los derechos adquiridos del Seguro Colectivo. La primera jugarreta que nos hicieron fue de juzgado de guardia: para el reparto de los fondos acumulados y su traslado a los Planes de Pensiones, en lugar de legislar que se tuviera en cuenta la antigüedad de los partícipes, tuvieron en cuenta la edad. Algunos que llevaban menos de 10 años de antigüedad en la empresa y estaban próximos a la jubilación, cuando se jubilaron se llevaron una morterada. Un chollo para ellos y una injusticia para los que habíamos acumulado más antigüedad, pero nos faltaba edad.

El Plan de Pensiones tenía también ventajas, ya que la empresa aportaba un porcentaje que doblaba el de los trabajadores y se sumaba al plan de cada cual. Entonces no sabíamos qué derroteros iba a tomar la fiscalidad, aunque intuíamos que la voracidad de los políticos españoles asfixiaría una idea que funcionaba bien en otros países.

Entonces los Planes de Pensiones eran intocables hasta el momento de la jubilación. Se pueden percibir en forma de capital, en forma de renta, en forma mixta o de manera desordenada. Había una bonificación fiscal del 40% para los que quisieran recuperar el plan en forma de capital, algo a lo que Hacienda pronto echó el ojo. En este momento sólo es aplicable a las aportaciones realizadas antes de 2007 y por un tiempo limitado, y si no se usa dentro de los plazos establecidos, se pierde ¿a ver por que? En cuanto huelen pasta no lo pueden evitar ¡A por ella! Ahora quieren hincarle el diente a los beneficios obtenidos por las empresas españolas en el extranjero. Veremos si mantienen en España el domicilio social o si se marchan. Luego quieren que los negocios de la City se trasladen a nuestro país. Ni que fueran estúpidos. Si acaso, a Gibraltar, que es de ellos.

El gancho que utilizan para que los incautos contratemos planes de pensiones es la posibilidad de meter dinero limpio en los planes para pagar menos en la declaración de la renta. Error que luego se pagará con creces al recuperar el plan.

Pero, ¿qué ocurre a la hora de recuperar la inversión? Que es una trampa. Se puede salir de ella, pero con muchos trasquilones. Será más comprensible con un ejemplo: Si tienes 150.000 € en el plan y los quieres recuperar, tienes que saber lo invertido antes de 2007 para conocer qué parte del plan se podrá beneficiar de la reducción del 40%. Pongamos que hasta el 2007 has acumulado participaciones por valor actual de 105.000 €, pues bien, te beneficiaras de una reducción de 42.000, con lo cual, de esos 105.000 € sólo serán fiscalizables 63.000 €.

De las posibilidades de cobro, las más gravosas son en forma de capital.

Sacando todo y aprovechando la reducción del 40 % de las aportaciones anteriores al 2007:

Los 63.000 € más los 45.000 € aportados al plan desde el 2007 para ahorrarte fiscalidad totalizarán 108.000 €, dinero que se sumará en la declaración de la renta a la pensión anual percibida y al resto de rentas. Me salen 45.000 € a pagar en la declaración: un 30% de mi plan que desaparecerá entre las uñas del recaudador sin ninguna contemplación. ¿Si no vas a comprarte algo, de qué te sirve terminar con el plan? Tienes que meter el dinero en otro sitio, con la preocupación de moverlo para que no se lo coma la inflación, porque apenas dan intereses.

Si optamos por sacarlo en forma de renta y lo hacemos de la forma más moderada (6000 € /año):

Nos durarán unos 25 años, y pagaremos a Hacienda 32125 € (1285 €/ año). Es la opción menos gravosa con el reglamento actual, sobre todo, pensando que es una opción a plazos que obliga al recaudador esperar 25 años para ajustar las cuentas. Que 6000 € al año sean o no suficientes va a depender de la inflación y de los cambios fiscales. En este caso, tengo que preguntar si retendrán el 19% o si por la cuantía y las condiciones familiares no retienen. Retengan o no, salen a pagar los 1285 € al año. En cualquier caso, lo que se llevan es algo más del 20%.

Si lo hacemos en forma mixta, primero capital y luego renta:

Sacamos los 105.000 € para aprovechar el 40% de reducción, la declaración de la renta del año me sale a pagar 25.000 €. Los 45.000 € restantes del plan los podemos sacar en mensualidades de 6000 € al año, y nos durarán 7 años y medio. En esos 7 años pagaremos 1285 € /año, lo que totalizarán 9600 €, en total, 34.600 €. Eso en el caso de que la administración del plan no entre en pérdidas, que todo puede ser.

Si estamos pensando en no utilizar el Plan y que a nuestra muerte se lo lleven los herederos para que tribute por el Impuesto de Sucesiones, no va a ser posible: están obligados a tributar por el IRPF como renta de trabajo, y lo tendrán que incluir en la declaración de ese ejercicio, con una subida de la base imponible importante. Espero que dentro de un tiempo no les obliguen a tributar también a los beneficiarios por Sucesiones, porque de estos no te puedes fiar. Las trampas y los tramposos van unidos, como el pañuelo al moco.

Es cierto que hasta el momento no me he acordado de los beneficios fiscales que he tenido en las declaraciones de la renta por invertir en planes de pensiones. Hasta el 2007 sólo hice las aportaciones mensuales pactadas. He aprovechado las ventajas fiscales, invirtiendo cantidades dentro del margen establecido, y lo hice a partir de 2013, que fue el año en que el señor Montoro salió del armario, y se dejó los colmillos largos para chuparnos hasta las entretelas. Me he visto obligado a invertir 41600 € en los últimos 5 años en el Plan de Pensiones para evitarme pagar alrededor de 15.000 €, dinero que habría tenido que ingresar en Hacienda. Ahora tendré que pagar por la osadía, más del doble de lo que me ahorré. Eso sí, intentaré recuperar el dinero de mi Plan de Pensiones pagando los menos impuestos posibles. No quiero que mi dinero engorde a esos a los que se les llena la boca con la POLÍTICA SOCIAL para ocultar lo que hacen: repartir en subvenciones y ayudas, los ahorros de la gente previsora y sacrificada, para asegurar el voto de los imprevisores y de los que viven de las ayudas sociales. ¡Ojo con ellos!, que son los que reparten. Ahora, en el cuento moderno de la cigarra y la hormiga, echan a la hormiga de su casa para meter a la cigarra: http://elblogderamon.com/fabula-de-la-cigarra-y-la-hormiga/.

Tampoco he citado la rentabilidad del dinero metido en el Plan. Poco hay que decir: Alta rentabilidad en los primeros años, cuando los fondos no eran altos y tenían un buen administrador, y luego rentabilidad acorde con las oscilaciones propias de la economía; en este año rentabilidad negativa. Si después del bocado fiscal que recibes al sacarlo, te pones a hacer cálculos de la rentabilidad conseguida, será para echarte a llorar. En cualquier inversión se te llevan un 21 % de las ganancias, pero aquí no es así: te imputan como renta en el IRPF la cantidad total que percibes del plan, cuando sólo deberían meter las ganancias obtenidas, porque el resto son tus ahorros, dinero limpio que ya ha pagado todo tipo de impuestos. Alguien debería tomar nota y llevarlo a los tribunales, y si fuéramos justos, a los tribunales penales, porque eso se llama doble imposición, algo injusto, un latrocinio. Como también es injusto el IRPF de las pensiones y ahí está, esperando que algún tribunal ponga las cosas en su sitio. Cochinos políticos.

¡Qué cosa más vergonzosa! No es que los políticos estén jugando con las pensiones, que lo han hecho vaciando la hucha de las mismas para comprar deuda del Estado y poder pagar las nóminas de los funcionarios, es que también meten la mano en los Planes de Pensiones, el instrumento que nos han vendido para complementar una pensión pública que no están en condiciones de garantizar. Ahora necesitan dinero antes de las elecciones para llevar a cabo obras innecesarias que les den votos. Si con ello rompen la economía y huyen las empresas y las inversiones les da lo mismo. El plan E de Zapatero sólo fue el inicio. En mi barrio, los podemitas están haciendo unas aceras que para sí las quisieran los neoyorkinos, que seguramente se las podrán permitir. Y no es que las anteriores estuvieran mal.

¿Que por qué me he puesto estupendo con los Planes de Pensiones? Cosas de la edad supongo. ¿Los recomendarías a tus enemigos? Yo no me atrevería, y a los amigos aún menos.