sábado, 23 de febrero de 2013

“Thrive”, un vídeo de You Tube.-

http://www.youtube.com/watch?v=8sYkAi04ojc&feature=em-subs_digest-vrecs

Muchos medios. Con eso he dicho casi todo. Es un video reciente, parce ser de finales de 2011 o principios de 2012. En él, Foster Gamble y su esposa hacen una denuncia, previniéndonos de una conspiración contra la humanidad por parte de la élite mundial (la que promueve el Nuevo Orden que se nos viene encima). Hay varios links en los que podemos enterarnos de quiénes son este matrimonio. No voy a comentar nada -http://www.thrivemovement.com/foster_gamble_blog, http://elanacoretacharlatan.wordpress.com/2011/11/23/thrive-prosperar/, etc.- y que cada cual saque sus propias conclusiones.

Sobre el contenido, no hay mentira mayor que una media verdad, y mucho más, si es por omisión, o sea, la que no se dice. 

Los Gamble ponen en el vértice de la pirámide de poder mundial a algunas familias de banqueros -las de siempre-, aunque no citan a todas. Se ve que a los Rockfeller les tienen más ganas que a los otros: a los Rothschild, a los Morgan, a los Warburg…, todas ellas detrás de la FED, organización económica a la que desenmascara la pareja, para que los norteamericanos despierten. Denuncian que la FED se camufla como parte de la Administración USA, cuando es un ente privado encargado de la, no despreciable función, de fabricar los billetes de dolar. Podría haber añadido, que el negocio de la FED es llevarse una comisión por la emisión de cada billete. Denuncian otras muchas cosas que son ciertas, entre ellas, las posibilidades energéticas que nos niegan, el creciente control de los alimentos y del agua, la salud de todos que ponen en peligro, y muchos etc.

La duda sobre la buena voluntad de los Gamble surge cuando colocan a los banqueros en la cúspide de la pirámide, haciéndonos creer que por encima de ellos no hay nadie y eso no es cierto. Les exonera de cualquier vinculación con los judíos, con el argumento de que los banqueros, en la 2ª Guerra Mundial, financiaron a los dos bandos. Al poco, sin embargo, reconoce que los Rothschild financian el Estado de Israel. Alguien que es capaz de hacer un vídeo de más de una hora, argumentando brillantemente un montón de denuncias –incluyendo el 11S-, no puede pasar de puntillas por la identidad de quien ocupa vértice de la pirámide, de quien está mirando por el ojo que todo lo ve. Puestos a descorrer el velo... Tampoco los temas que tratan son nuevos ni desconocidos en este mundillo de conspiraciones. 

Por grande que sea el negocio, es difícil poner de acuerdo a dos banqueros para que colaboren, pues lo normal es que compitan para dejar al otro fuera. Si es difícil poner de acuerdo a dos, más difícil aún será poner de acuerdo a cuatro o a nueve banqueros. 

Lamentable o no, aunque sea difícil, es posible hacer que colaboren, siempre que todos reconozcan o deban responder ante una misma autoridad. Esa autoridad existe y no es ningún banquero, es un religioso y eso en el vídeo ni se menta, tratándose como se trata de alguien que ejerce de Sumo Sacerdote de un antiguo Sanhedrín. Si ponemos el ejemplo de un árbol poderoso, las ramas serían los banqueros, y las hojas, las múltiples empresas y organizaciones que estos controlan; el tronco sería la organización sacerdotal que sujeta a las ramas y a su vez se nutre de múltiples raíces, que toman la sustancia de la tierra, de toda la Tierra, pues son raíces extendidas por todo el mundo.

Así que, ¡cuidado!: una cosa es querernos advertir, y otra distinta, querernos manipular. No me voy a poner incondicionalmente detrás de nadie cuando no sé a dónde me lleva. Si tan peligrosos son esos banqueros a los que desenmascara, ¿por qué no propone directamente su detención? Son una cuadrilla de indeseables a los que parece que no les tiembla la mano cuando se trata de controlar a la humanidad y hacer negocio a su costa, sea con guerras o con falsas vacunas. Parece que son responsables de tremendos crímenes y son a la vez cuatro gatos ¿Por qué les vamos a tener consideración, si ellos no la tendrían con nosotros? A la milla verde con ellos. Los Games se extienden en consideraciones bondadosas y pacifistas al final de su vídeo, quedándose cortos en las denuncias.

El poder, señores Games, no es suficiente argumento para que semejantes parásitos sobrevivan entre las naciones, controlando el admirado toroide, futuro de la humanidad. Es cierto que estamos hablando de poder y que la toma del poder mundial es su objetivo, pero hay más, que el poder por el poder no tiene sentido, y los Games, después de 35 años meditando, no se han dado cuenta o no lo han querido denunciar.

Quien controla a estas familias de banqueros y anda detrás del ojo que todo lo ve, en el vértice de la pirámide, no se conforma con el poder mundial. Son sacerdotes y están obsesionados con el culto a un dios, por eso no pararán hasta que todos los habitantes de la Tierra rindamos culto a ese dios. Son sacerdotes los que pastorean Espíritus engañados en este mundo y el otro. Este mundo no está abandonado y nos controlan a los hombres más de lo que nos parece. Somos presos en él ¿cómo íbamos a estar en una cárcel sin rejas ni vigilantes? las rejas son sofisticadas: el mundo en el que nos movemos, el cuerpo que nos contiene y la ignorancia de nuestra propia condición cautiva; a nuestros vigilantes, a los seguidores del creador, sus sacerdotes con sus servidores, les ha prometido poseer el mundo. No iban a trabajar gratis ¿Vamos comprendiendo? Lo malo para estos listos es que creen en una promesa imposible, aunque seguramente se han plegado pensando en el bienestar de sus herederos y de sus futuras generaciones. La muerte hace tabla rasa de todos y de nada sirve la posesión de bienes materiales o de tierras, pues nos esfumamos al morir.

Pero no. No vamos a convertirnos ni nos van a convertir a ninguna religión para conseguir la unificación del culto. Es mucho más sencillo. Su dios se conforma con poco: le basta con que caigamos en la tentación y deseemos poseer este mundo, el mundo que él creó. Él es su hacedor. Por eso, para darle culto sin que nos demos cuenta, nos hacen caer en el materialismo, la religión más seguida del mundo por creyentes diversos: da igual que seas musulmán o mormón. Sí, una completa falta de religión y de espiritualidad nos convierte de hecho en seguidores del demiurgo.

Estamos participando en una guerra entre dioses, con una apuesta por medio: en las batallas y escaramuzas, como en un tablero de ajedrez, las piezas somos nosotros, blancas y negras, el bien contra el mal, la verdad contra la mentira, los seguidores de Dios contra las piezas del diablo.

¿Con banqueros y sacerdotes de por medio, abandonados a nuestra suerte, quién crees que va ganando en esta guerra?, ¿quienes son los dioses y los demonios en este juego?

Seguramente has acertado.

Dioses o demonios ¿Qué es lo que se juegan en esta partida inacabable? Se juegan Espíritus, los nuestros: el Espíritu capaz de descubrir por sí o con ayuda de otros su condición cautiva y ajena a este mundo -la dura verdad-, no querrá volver a él cuando muera; el que no, seguirá haciendo nuevos papeles en este cine de sesión continua que es la vida.

¿Te parece poco? Ahora entenderás el significado de la frase evangélica que dice: "La verdad os hará libres". Si no conoces tu condición de esclavo, ¿cómo vas a luchar para ser libre? Esa es la verdad que hay que hay que encontrar. TAN SIMPLE... que parece mentira.

Ya lo saben señores de Gamble, si es que me leen. ¿Les sigue preocupando ahora la energía de un toroide, o la vida de los niños de África?, ¿siguen queriendo convertir este infierno en un paraíso?





martes, 12 de febrero de 2013

Noticia inesperada: el Papa, para poder jubilarse, renuncia, dimite, dice que lo deja … El desenlace, el próximo 28 de febrero.



Es cierto que Benedicto XVI ha dado un bajón y que se le ve mayor y cansado. No miente cuando dice que no tiene fuerzas para continuar, pero su condición física sólo es una parte de la realidad, la otra parte de la realidad nos dice, que su vejez ha dado pie a que las fuerzas que intrigan por hacerse con el poder dentro de la Iglesia han entrado en confrontación abierta. Por ahí van los tiros del escándalo del secretario ladrón al que perdonó, al que le echaron el muerto para tapar la verdad, ¡que vaya usted a saber en qué consiste! El Vaticano y el secreto van unidos. Eso es lo que ha podido llevar a Ratzinger a renunciar: entre tanta cuchillada de pillo, siempre se puede escapar una y si te toca a ti ... 

No se puede decir que ahora haya un cardenal díscolo y ambicioso armando el Belén, como sucedió en el pasado cuando el pobre Celestino V – un hombre de Dios- abandonó el Papado por las insidias de un cardenal llamado Benedicto Gaetano que, después de sucederle, lo mandó envenenar. La lucha por el poder dentro de la Iglesia en estos tiempos va por otros derroteros. Son organizaciones religiosas o pseudo religiosas las que compiten entre sí por la cabeza de la Iglesia. Lógicamente, todas las organizaciones, hasta las demoníacas, tienen cara humana.

En los años de Celestino V los grupos que luchaban por el poder eran Güelfos y Gibelinos, apoyados respectivamente por Orsinis y Colonnas, apoyados a su vez por el Emperador o por el rey de Francia, aunque andaban todos disfrazándose de una u otra cosa para engañar al contrario. En aquellos tiempos, las órdenes religiosas tampoco eran ajenas a los cambios de Papa: detrás de los Gibelinos estaban los Dominicos y los Franciscanos, como detrás de los Güelfos andaban los Benedictinos y sus hermanos los Cistercienses. 

Mucha mierda entonces y mucha mierda ahora, pues detrás de los grupos que luchaban por el Papado en el siglo XIII había poderosos banqueros con intereses muy importantes, como los hay en nuestro tiempo entre los que se navajean con disimulo. Ahora los que pretenden pastorearnos a los católicos son más sectas que órdenes tradicionales, aunque éstas últimas no faltan: Legionarios de Cristo, Opus, jesuitas… No importa: al final, elijan al cardenal que elijan, será masón, le llamaremos Santo Padre, y todos tan contentos. Me daría con un canto en los dientes si el cardenal elegido creyera en Dios.

Espero que a Ratzinger, que también se comporta como un masón, lo dejen disfrutar de su jubilación y, entre unos y otros, no lo embalsamen sin hacerle la autopsia, como hicieron con el pobre Juan Pablo I, que vaya usted a saber de qué murió.

En esos entornos satánicos a la modernidad le cuesta entrar: para poder ser Papa de verdad el anterior debe estar bien muerto. Es la tradición.

¡Ojalá me equivoque!

Pero, ¿qué pintamos los bautizados en este teatro?

Se trata de una Iglesia que dice que fue fundada por Jesús, un judío de hace 2000 años nacido en Nazarét, que lo único que practicó en su vida fue la religión de sus padres, y si acaso pretendió cambiar algo de ella fue devolverle la decencia perdida por tanto sacerdote, reivindicando al Padre como verdadero Dios, intentando enseñar a sus discípulos la forma de llegar a la verdad. Verdad, que si se alcanza, parece ser que libera a nuestro Espíritu de volver a este mundo, y con ello de seguir sujeto a la muerte.

En este teatro, los bautizados no pintamos nada. Somos los tontos necesarios, el público de aplaudir. Que elijan al que quieran y con su pan se lo coman, pues esos que nos pastorean nos ocultan la verdad. Yo creo que ni la conocen, ni saben explicarla con palabras comprensibles. Su discurso es una mezcla, un totum revolutum de fe y sinrazón.

La contradicción está en que la parte de la Iglesia que nos toca de cerca está llena de gente honrada y caritativa, que es la que da de comer al hambriento, al sediento y viste al desnudo, etc. en este tiempo de crisis, pero a los de arriba, a los del organigrama complejo que acaba en San Pedro de Roma, mejor no escucharlos que te lían. En su lugar, lee y medita sobre el evangelio de Juan, que algo aprenderás.