jueves, 27 de diciembre de 2012

Demasiados empleados públicos, demasiados privilegios

Sí, ya sé que no habéis cobrado la extra de Navidad y que os han hecho los descuentos de IRPF de la misma, aunque también sé, que todo no está perdido para vosotros: os devuelven los descuentos indebidos y hay promesas en el aire, de que cuando la cosa mejore, os darán la paga que os han quitado. En algunas Autonosuyas ya han hecho trampejas y la habéis cobrado. Los que promueven los recortes para salir del socavón, y los que están dentro del socavón ¡que se jodan!

Sé, que ese sacrificio de vivir sin la Extra, la mayoría de vosotros, aunque lo lleváis mal, lo lleváis con paciencia, pues, en el fondo sabéis, que de una forma u otra, lo recuperaréis. El trabajo vuestro viene siendo seguro y hay muchos años por delante; además, en el fondo de vuestro entendimiento sabéis, que el sistema os necesita. El sistema son los políticos, vuestros enemigos de hoy y a la vez amigos y aliados de siempre, que estáis unidos por cadenas, más que por lazos familiares. ¡Cuántos de vosotros - y no me refiero a los que habéis entrado en la Administración por Ley-, en los últimos 35 años muchos habéis entrado de la mano de políticos afines, que, con el mayor descaro, os han abierto la puerta de atrás o, simplemente, os han colado, dándoos el puesto de una oposición que, por justicia, le hubiera correspondido a otro! Cuando el contrato es laboral y no de funcionario..., mejor no imaginar.

También sabéis, muy en el fondo, que fuera de la Administración hay un mundo cruel donde el hombre es un lobo para el hombre, donde los contratos de trabajo pueden ser de horas, días, semanas o meses, en el mejor de los casos, y donde la condición normal del ser humano es la de visitante asiduo del INEM o INAEM o como le quieran llamar en esta quebrada España partida en 17 trozos. 

En esa situación, "Mejor sin paga que sin nada". En el mundo exterior no hay seguridad, que el frío y el calor de la intemperie atacan por igual, como atacan los contratos basura, la economía sumergida y los bajos salarios. ¡Quién fuera mileurista en estos tiempos recuerdan muchos!  No es  fácil sobrevivir y traer dinero o comida a casa. Y gracias a que hay gente buena, organizaciones religiosas y empresas decentes que donan comida para los necesitados, que son muchos en estos tiempos.  

Frente a esos, los sin paga extra de Navidad de la Administración siguen disfrutando de abundantes privilegios: sólo como ejemplo decir, que el calendario laboral no siempre rige en su mundo, cuando son ellos o sus gerifaltes los que lo elaboran; así, aunque usted -probo ciudadano- vea que el 24 y el 31 de diciembre de este año nefasto están marcados en el calendario 2012 como laborables, aunque vea usted las peluquerías y todo tipo de establecimientos abiertos, no se le ocurra ir a darse de baja o alta de algo en ninguna oficina de Hacienda o de la Seguridad Social, por decir dos sitios concretos, y ello, por mucho que le corran los plazos -otro invento de funcionario hecho para hacerte la pascua y arrascarte el bolsillo. Con suerte, habrá un cartelito en la puerta de la Administración de turno, como aviso de que vuelva otro día, que ese día está cerrado. En las webs de Internet de esos servicios, no habrá ninguna advertencia, y no se canse, que el teléfono tampoco lo atienden; si acaso, los cartelitos le dirán que en tal dirección abren ese día, pero únicamente el registro. ¡Ole!, ¡viva la Pepa!,  y tú pensando que podías hacer esto o aquello aprovechando que es día laboral. Pues no ¡Jódete y vuelve otro día!

¡Incauto! Tú existes para que los políticos y sus amigos, los que viven de lo público coman, sean o no funcionarios, de carrera o chusqueros ¡No!, no es al revés, estás equivocado.

Sí, ya sé que con Franco también pasaba, pero los empleados públicos de entonces eran tres veces menos, y aunque la mayoría habían sacado las oposiciones con mucho esfuerzo, había mucho enchufado, que para eso estaba lo que se llamaba "tener empeños" y existían los certificados penales y los informes de si eras o no afecto al Régimen para poder entrar.

Este mal es endémico en España: quizás hemos disminuido las consecuencias del "Vuelva Usted Mañana" de las ventanillas que denunciaba Larra, pero lo indudable es que no lo hemos superado. La razón, la de siempre: los dueños de la Administración, que somos todos, seguimos permitiendo que los empleados que nos administran, sean o no políticos, ejerzan como dueños del cotarro y se nos rían, haciendo lo que les da la gana. No sé de quién es la cita, pero nos va que ni pintada: "País de corderos, gobierno de lobos".

Así, que no se extrañe nadie si las ovejas nos cansamos un día de tanto jeta, y pensamos que hay que hacer limpieza a fondo, acabando con Autonomías, políticos y dos terceras partes del empleo público. Demasiado lobo sangrando al ganado, demasiada carga para el burro. Si no somos capaces de imponernos, se irá todo por la alcantarilla, ¡Y que les den!. ¡A la mierda! -diría Fernando Fernán Gómez, saliendo de su tumba. Y como en alguna ocasión ocurrió, que se vaya todo a la mierda, que ya ha ocurrido, por mucho que los historiadores nos lo oculten, haciendo caso al rey de turno, a la Iglesia o al copetín de la baraja. 

¿O que se piensan que ocurrió en España en el año 711?, ¿que nos invadieron los moros? Pandilla de incautos... Los hispanorromanos de entonces, que eran la mayoría de la población, cansados de soportar las guerras entre familias visigodas por la sucesión al trono, y hartos también de guerras de religión inacabables entre facciones de la nueva religión cristiana, abrazaron la fe musulmana en masa para librase de tanta sanguijuela. Fue una verdadera revolución llevada a cabo por una sociedad que mando todo al carajo para liberarse.

Ya sé que toda la culpa no la tienen los funcionarios, que un par de días de fiesta más no van a ningún lado. Pero que tomen nota todos y que no toquen más los cataplines, cuyons, pilotak o bolas, que la paciencia y fuerza que queda es escasa: siempre hay una gota que colma el baso, un último gramo que derrenga la caballería, un último escupitajo que colma la paciencia del más manso.

¡Qué coño!, que no nos da la gana aguantar más cargas.



lunes, 3 de diciembre de 2012

La crisis que padecemos es una enfermedad: ¿cuál es su causa?

Cualquiera que haya leído mi Blog sabe que no soy amigo de que la Administración del Estado esté en manos de políticos; siempre he defendido que nuestras empresas públicas, ayuntamientos, etc., deben ser gestionados por administradores profesionales bien pagados, que respondan de su gestión ante órganos que representen a los ciudadanos de forma honorífica. Como cualquier comunidad de vecinos. La experiencia nos dice que los políticos españoles practican el gasto compulsivo, son corruptos, desleales a la Nación, etc, todo dentro de una Administración muy compleja e innecesaria, donde los órganos autonómicos conviven con el Estado Central, con Diputaciones y Ayuntamientos, duplicando, triplicando y cuadruplicando competencias. Casi ninguno puede presumir de una buena administración, y el que lo hace, su gestión, comparativamente hablando, no pasa del aprobado, pues siempre la basan en administrar medios ingentes, precisos por otra parte para que se mueva una administración muy sobrecargada, corrupta, ineficaz, e innecesaria.

Al final, padecemos una Administración que nos sobrecarga de impuestos y que es la causante principal de la crisis que padecemos. Sí, ya sé que se dice que nuestra crisis es culpa de una crisis internacional, de una crisis financiera, de una burbuja inmobiliaria, del paro existente, de la retracción de las economías domésticas, del peso de nuestra deuda, del masonazo de Zapatero... Todo eso lo hubiéramos superado hace tiempo si disfrutáramos de una administración acorde a las necesidades estrictas de 40 M. de habitantes.

Nos dicen que nuestra economía saldrá de la crisis cuando volvamos a crecer. ¡Cómo  vamos a crecer con unos impuestos como los que padecemos!, necesarios por otra parte, para que coman caliente y vivan como reyes más de 400.000 políticos, ayudados por más de 3.000.000 de empleados públicos (funcionarios y enchufados de uno u otro signo político, nacionalistas o no nacionalistas).

¡Es imposible! Transportamos sobre la chepa demasiados parásitos, la mayoría de los cuales no pueden justificar, ni su cometido ni su salario. ¡Cómo vamos a tener una economía ágil, si anda sobrecargada!


Tendemos a despreciar a la democracia más importante del mundo -los USA-, pensando que no nos llegan a la suela de los zapatos, por su deficiente estado del bienestar y su privatizada sanidad. Es cierto que hay muchas diferencias y que podemos superarlos en algún aspecto, pero nos daríamos con un canto en los dientes si los europeos en general y los españoles en particular disfrutáramos de la fiscalidad de los estadounidenses, de su organización política y de su democracia. 

-Aquí pagamos el combustible 3 o 4 veces más caro, a causa de la fiscalidad.
- Lo mismo ocurre con la electricidad.
- Con los automóviles (aquí carísimos)
- Su IVA equivale al nuestro súper reducido.
- sus seguros de hogar y de autos suele ser la mitad que los nuestros.
- Por el tabaco y el alcohol no pagan impuestos especiales.
- Sus empresas no soportan el llamado I.A.E. (Impuesto Actividades Económicas).
- No pagan Impuesto de Circulación, ni les obligan a pagar 40 €/año por la ITV.
- En algunas ciudades pagan por aparcar como aquí, pero por unos pocos dólares al año.
- Apenas hay tasas municipales y no existe el I.B.I (Impuesto de Bienes Inmuebles).
- Pagan IRPF cuando ganan más de 3000 $/mes (la cifra no está actualizada).
- Sus sueldos triplican los nuestros.
- Los herederos no pagan Impuesto de Sucesiones ni Donaciones.
- Aunque están intentando modificar su sanidad, y los que ganan más de cierta cantidad no tienen derecho a sanidad pública, tampoco les descuentan nada de su salario por ello, ni a la empresa ni a los trabajadores. Pero con el dinero que se ahorran pueden pagarse de sobra un buen seguro médico.
- Las escuelas también son públicas y dan mejor enseñanza que las nuestras.
- Su sistema legal es mejorable, pero tienen claro que terroristas, asesinos y violadores deben pagar sus penas. Lo mismo, los políticos corruptos y mentirosos, y los grandes financieros, que si roban los enchironan y les hacen devolver lo robado.
- Etc.

Aquí, hacen falta cerca de tres ciudadanos solventes que paguen impuestos para alimentar políticos, empleados públicos -funcionarios o no-, parados y pasivos; en los USA serían 145 los ciudadanos necesarios para financiar sus cargas.

Los norteamericanos, como se puede comprobar, son mucho más libres que nosotros, ya que ellos, en un país con más de 300.000.000 de habitantes, no tienen que alimentar a tanta gente política, funcionaria y sindicalera que sólo aportan cargas a la comunidad. Esta es la verdadera causa de esta enfermedad social que padecemos en España, a la que llamamos crisis.

A ver si espabilamos, que ¡No - hay - derecho!: ni a soportar tantas cargas, ni a convivir tantos idiotas juntos, que no protestamos. Si no me creéis, leer el documento adjunto.

Conferencia de Jesús Fernández Villaverde

viernes, 23 de noviembre de 2012

Rocaguinarda, Serrallonga y más.-

Según la Wikipedia, en el siglo XVI operaban como bandoleros en Cataluña Antonio Roca, Testa de Ferro, y Perot Rocaguinarda, este último apodado "Perot lo Lladre", que fue citado por Cervantes en el Quijote, que al parecer lo conoció. Su cuadrilla estaba formada por Joan Gili "Janot", el fill de Joan, Jaume Alboquers, "El Escolanet de Poliñá" y Gabriel Galí "Barceló". En aquél tiempo, los asaltantes de caminos fueron instrumentos del clan popular de los Nyerros o Nyarros, en su lucha privada contra el clan aristocrático de los Cadells. Una guerra entre familias de la nobleza catalana para mantener intacta su influencia y su poder en una parte del reino de Aragón.

En el XVII, robaba en los caminos catalanes un tal Joan Sala, apodado “el Serrallonga”. La cuadrilla de Serrallonga estaba compuesta por un tal Tallaferro, el Toca-son, el Petit Comí, el Xafarroques, el Fadrí de Sau, el Hereu Puig de la Vall, el Negre y el Vermell. La historia de este bandolero ha llegado a nuestro tiempo, fantaseada por algunos escritores que lo han convertido en el bandolero catalán por excelencia.

En los pasados siglos, la realidad del país hacía que los caminos fueran un peligro para los viajeros, que terminaban sin dinero ni alhajas, con sus huesos aplastados en ocultas simas y profundos barrancos, donde los bandoleros de toda España solían ocultar las pruebas de sus fechorías. Ejercían un oficio pernicioso para la sociedad, del todo injustificable. El pueblo llano seguramente los amparaba por su hastío contra las clases dirigentes.

En nuestro tiempo, salvo algunos episodios de bandolerismo llevado a cabo en carreteras y autopistas por bandas extranjeras, el bandolerismo ha cambiado: los nuevos bandoleros no suelen arriesgarse asaltando viajeros y postas como los bandoleros del pasado, optan por meterse a políticos, y hoy, en lugar de bandas fundan partidos que amparan la corrupción en toda España; pero en las regiones independentistas, cuando los corruptos se ven descubiertos, se envuelven en la bandera, haciendo creer a la gente, que los que les acusan van en contra de su proyecto de país. Con ese cambio de formas a la hora de pillar, quieren forrarse a costa del Común, pero formando parte de España, los nuevos protegidos de los Cadells y Nyarros de hoy en Cataluña no las tienen todas consigo.

Una parte de los mal llamados Paisos Catalans ha estado mandada, durante más de 30 años, por un señor bajito con muy mala baba, que a través de testaferros, se ha hecho con una gran fortuna, aprovechando comisiones y gabelas. Lo destapó hace algunos años el que fue su sucesor en la Generalidad, el socialista Maragall, que afirmó del partido del señor bajito, que su problema se llamaba 3%. Informaciones del periódico El Mundo afirman, que con el dinero evadido de España, el bajito ha levantado negocios que dirigen sus familiares en varios lugares de América, mientras, él, como jefecillo del cotarro, presumía y presume de padre de la patria y de Honorable, queriendo imitar a su predecesor Tarradellas, que lo fue.

Pero este señor se hizo mayor, y hoy, es su lugarteniente -un mal encarado de mirada cínica- el que dirige esa autonomía. Este personaje lleva varios meses insistiendo en la idea de que España roba a los catalanes. Pues bien: el periódico el Mundo, que viene publicando unos informes policiales en los últimos días, ha dejado al descubierto la corrupción en Cataluña: No es España la que roba a Cataluña, es esta pandilla la que ha estado robando a los catalanes y al resto del País, desde el principio de la democracia.

Se da la circunstancia, de que en su huida hacia adelante, el cabeza actual no quiere continuar con el juego anterior de independencia si pero no, y pide abiertamente la independencia. Con ello, echa tinta como el calamar para escabullirse, evitando dar cuenta ante la urnas de su nefasta gestión, intentando asegurar la impunidad de sus antecesores. Manteniendo la actual estructura política, aunque no siempre se cumpla lo de la igualdad ante la Ley, estos corruptos podrían acabar con sus huesos en la cárcel. Bastante suerte tuvieron los prenafetas convergentes con ser indultados. Más indultos...¿?

Lamentablemente, las encuestas están pronosticando que los ciudadanos catalanes en lugar de votar con la mano en el bolsillo y con la cabeza, este domingo lo harán: unos tapándose la nariz, y otros, guiándose por los sentimientos, con el culo, que es el peor órgano pensante. Todos con su voto pueden hacer que los nacionalistas aumenten su presencia en el parlamento catalán, y que echen mas combustible al conflicto independentista.

Esta es la opinión que me merecen las informaciones de la corrupción en Cataluña y en otros lugares de España, que entre todos nos han arruinado. Es triste que se conozcan estas cosas y hagamos como que no existen: las gentes que debían servir al Común catalán, han basado su hacer político en recaudar para su peculio y el de su partido el 3% de todas las obras que contrataban, aunque parece que no era un 3%, como dijo Maragall, sino un 4%.

Un amigo dice, que hay que cambiar con frecuencia de políticos, que son como la ropa interior, que si no la cambias a menudo, huele mal. Por eso, hay que votar a gente nueva, aunque sea desconocida, y hacerlo siempre. Únete también a movimientos que pidan la supresión de las Autonomías, son un cáncer para los españoles que debemos extirpar: demasiados políticos a vigilar, defendiendo cada uno su propio interés.

Espero por el bien de todos, que a estos pájaros les salgan mal las cuentas. ¡Ya está bien de falsos patriotas! Ni Cataluña ni el resto de España lo merecemos. O... sí, por pasar de todo. ¡Qué mala suerte hemos tenido con los políticos españoles, sean de la región que sean!, ¡qué pena también con los nuevos Cadells y Nyarros catalanes y de otras comunidades!, que siguen apoyando a saqueadores de bolsillos ajenos para favorecer sus intereses, aunque los nuevos bandoleros no lleven trabuco.

Novedad: el Pujol ha confesado, y de Honorable, res de res.


domingo, 18 de noviembre de 2012

Justicia y Desahucios


Las reformas en las leyes deben perseguir las injusticias. Las hay a montones, pero ninguna injusticia tan flagrante como la que encierran las leyes que regulan los desahucios. A la hora de acercarse a los tribunales civiles para recuperar sus créditos, los poderosos -sobre todo cajas y bancos- no tienen necesidad de verles la cara a los desahuciados, que para eso pagan a abogados y procuradores, que les evitan ver el sufrimiento de los deudores, una especie humana que tiene la mala costumbre de no pagar, incumpliendo los contratos que firman, algo que pone en peligro la cuenta de resultados.

Aunque algunos dicen que los banqueros no gobiernan, la realidad deja claro que su influencia llega hasta los cielos. ¡Bueno!, de los cielos no estoy seguro, pero hasta el Vaticano llega su influencia, que el papa anterior, el Wojtyla, llegó a modificar el Padre Nuestro para descargar sus conciencias: 

Donde decía "...perdona nuestras deudas, así como nosotros perdonamos a nuestros deudores..."  puso: "... perdona nuestras ofensas, así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden..." y se quedó tan ancho. Desde entonces, los consejeros de bancos y cajas no tienen necesidad de pedir a Dios que perdone sus deudas cuando rezan, y por lo tanto, tampoco están obligados a perdonar a sus deudores, porque el Padre Nuestro ya no habla de deudas.

La cruda realidad también nos dice que los propietarios desahuciados de sus viviendas salen de los juzgados sin vivienda y con la deuda casi intacta, para que sigan pagando sus deudas y no se ofendan los consejeros aludidos, los cuales podrían verse obligados a perdonar a los que les ofenden por esas minucias, que eso sería muy desagradable para sus señorías.

Pero dejemos el Padre Nuestro. La injusticia de las leyes con las que se deja sin hogar a muchas personas en nuestro país es manifiesta: mantienen la deuda y pierden la casa, (deudor y fiadores). Y eso no es fácil de entender, ni como ciudadanos, ni como cristianos, pues, en un tribunal, uno debería sentirse amparado, si no por las leyes, al menos por el juez. Y no suele ser así: los jueces ven pasar los casos por sus tribunales con la indiferencia que da la práctica forense y la impotencia de las leyes injustas; con esa misma indiferencia ven a los banqueros y a los subasteros moverse por sus juzgados, para quedarse con los bienes subastados a precio de saldo. Perra vida, por culpa de tanto avaricioso jugando con las necesidades básicas del ser humano. No hay palabras para definir a estos oscuros seres, que los buitres limpian la naturaleza de cadáveres y estos te desnudan estando vivo.

Las víctimas quedan condenadas por los restos a sobrevivir en la economía sumergida, pues, de no hacerlo, tendrán que seguir pagando la deuda contraída en un contrato hipotecario, deuda que seguirá creciendo con los intereses de mora. ¿Hay otra salida? La hay: emigrar y probar suerte en otro país, que aquí, digan lo que digan, mandan los bancos. Y ¡Cuidado!, que pueden perseguirte.

Uno se extraña, de que en un país con tantas escopetas, no haya nadie que se líe la manta a la cabeza cuando pierde la casa. Pues no: la única violencia que se genera es contra ellos mismos, que algunos se suicidan.

Seguramente, los españoles ya no somos tan fieros como nos creemos. Los hombres bravos de antaño, que conquistaron América con voluntad y hambre; los que hace dos siglos acabaron con el ejército de Napoleón a trabucazos; los que hace cuatro días nos enfrentábamos en guerras civiles hemos perdido la bravura. Ese genio y ese culto a la violencia ya no existe ¿es cobardía lo que nos queda?, porque caradura y jeta sobra, sobre todo a los que se han colocado bien arriba, como banqueros y políticos.

La justicia dice que hay que pagar las deudas y estoy de acuerdo: las deudas hay que pagarlas, pero que tengas que seguir pagando las deudas de tu casa después de que te hayan echado de ella... ¿? 

  


miércoles, 7 de noviembre de 2012

Los homosexuales que casan ya son matrimonio. Si no tiene marcha atrás, propongo que se cambie el nombre del matrimonio hetero por otro.-


De entrada, mi respeto hacia las personas que tienen gustos sexuales diferentes al mio; entiendo, que si esas personas se emparejan en un proyecto de vida común tengan los mismos derechos que yo, que vivo y estoy casado con una mujer. 

Dicho lo cual, también entiendo que su unión, por mucho que diga el Tribunal Constitucional, no es un matrimonio. Las palabras son importantes y tienen el significado que tienen y el significado de la palabra matrimonio tiene miles de años a su espalda, que no es una palabra propia de la religión, ni de la Iglesia, sino del Derecho Romano, que reconoce a la mujer que contrae matrimonium con un hombre, el derecho a tener hijos dentro de la legalidad. 

Esa unión entre personas del mismo sexo merecerá un nombre digno, pero no puede definirse como matrimonio. ¡Anda que no hay nombres posibles! ¡Pues no!, se trataba de tocar las narices al resto de la sociedad en general y a nuestra cultura, Iglesia incluida.

Si esa unión va a llamarse en adelante matrimonio, por favor: que cambien el nombre a la unión heterosexual, que si no, aquí no habrá dios que se entienda.  

Qué tiempos aquellos en los que se ponía sonoros nombres a cada tipo de unión carnal: la unión permanente y fiel de soltero con soltera la llamaron abarraganamiento y barraganería -en ella andaban muchos curas- y se decía de la pareja en cuestión que estaban amancebados; en el concubinato también hay relación marital y estabilidad, pero suele fallar la fidelidad, pues normalmente el hombre está casado. El concubinato se aplica también en algunos países a las parejas homosexuales. 

Hay otros nombrecicos populares: arrimo, apaño, arreglo, lío, contubernio...

¿Hemos perdido en este país esa facilidad para poner mote a cosas nuevas o viejas?, ¿no podemos bautizar a estas uniones con un nombre lo suficientemente atractivo para que se extienda por nuestra sociedad, dejando sin efecto una sentencia que pone en entredicho al matrimonio tradicional?

Yo voy a poner mi granito de arena y propongo que a la unión homosexual se le llame GAYMONIO.

¡Ah! A ese tribunal que llaman Constitucional que lo disuelvan y que le llamen el Tribunal de los TRAGADERAS, que las tienen de ballena. 


domingo, 28 de octubre de 2012

Las grullas nos anuncian la llegada del invierno.-



Hoy me han dado una buena noticia y yo la transmito: nuestras amigas las grullas han pasado por encima de mi casa, anunciando con antelación la llegada del invierno. Para estas simpáticas zancudas sólo hay dos estaciones: el invierno y el verano, y nos lo anuncian a grandes gritos (Gru-Gru). Éstas iban camino de Gallocanta, donde descansarán unos días para dar el salto a Extremadura y Andalucía, donde invernan. A finales de febrero, principios de marzo, anuncian la llegada del buen tiempo, y ahora lo contrario. Las distinguiréis porque van discutiendo como locas y volando en V. 

¡Qué majas!






martes, 23 de octubre de 2012

De los barros del 11M a los lodos del separatismo actual. España, la patria de todos, en peligro.


El domingo 21 de octubre, escuché una reflexión a unas palabras que José María Aznar pronunció a las 14:30 del 11 de marzo de 2004 “11M”. Dijo esto: “En España no vamos a cambiar de régimen, ni porque los terroristas maten, ni para que dejen de matar”. Interpretaban los comentaristas que Aznar estaba dando una contestación pública a una propuesta -y esto lo digo yo-  que habría recibido de traidores aforados.

En la mañana del 11M -tras el atentado terrorista- en todos los medios de comunicación tenían por seguro que era ETA la autora del atentado: fueron muchos personajes políticos, comenzando por Ibarreche, los que no dudaron en achacar el atentado a la organización terrorista. Tras las manifestaciones de Aznar, los medios de comunicación proclives al partido socialista, que entonces estaba en la oposición, cambiaron el discurso, comenzando a afirmar que los autores del atentado eran islamistas, iniciando un ataque mediático sin precedentes contra el gobierno del PP.

Llevábamos viendo desde hacía algún tiempo, que algunos, Arzallus entre ellos, estaban incómodos con los reveses que sufría ETA, porque en una España sin terrorismo el nacionalismo podía quebrar, y con ello, la imposibilidad de lograr la independencia que buscaban. La quiebra del nacionalismo en aquél entonces era posible: las reacciones populares al secuestro y posterior asesinato de Miguel Angel Blanco, en julio del 97, lo evidenciaron, pero Aznar no supo aprovechar la reacción espontánea de la sociedad, para apuntillar al nacionalismo vasco con el apoyo popular que se generó; hubiera sido una buena lección para los demás nacionalismos. Esas reacciones son escasas y no se pueden dejar pasar cuando suceden. Pero Aznar y su ministro del Interior se arrugaron y no se atrevieron a encabezar el descontento, abandonando en manos de la policía vasca a las masas que buscaban sacar de sus madrigueras a los batasunos, sin duda para lincharlos. La policía vasca se dedicó a protegerlos. Lo justo es defender a los perseguidos por las masas hábidas de venganza, pero en este caso no fue lo más inteligente. Cuando los poderes públicos hacen dejación de sus funciones, no se puede criticar la acción de las masas cuando se toman la justicia por su mano. En aquél tiempo funcionaba en el País Vasco lo de Arzallus: "unos mueven el árbol y otros recogen las nueces". La gente veía cómo la policía vasca miraba para otro lado, siguiendo las directrices del gobierno vasco y el asesinato anunciado de Miguel Angel Blanco fue la gota que colmó el vaso en esa parte de la sociedad vasca contraria al independentismo. Pero los pasos de Aznar iban por otro camino, un camino más largo que también alejaba a los traidores nacionalistas de sus negros objetivos, y eso no gustaba a los falsos padres, de las también falsas patrias vasca y catalana.

Si las palabras que pronunció Aznar el 11M respondían a las presiones de los oscuros poderes que manejan los hilos del terrorismo, Aznar pudo hacer más de lo que hizo tras el 11M, pues tuvo varios meses para enderezar las cosas, desenmascarando a esos enemigos de España a los que negaba con sus enigmáticas palabras un cambio de régimen: pudo acusarlos sin miramientos, con nombre y apellidos, del atentado terrorista. Una declaración contundente en la televisión pública hubiera bastado para ganar la batalla de la propaganda, aprovechando también todos los medios de comunicación del gobierno; podía haber informado, que había ordenado al ministro del Interior la detención inmediata de esos interlocutores, como autores intelectuales -presuntos o no- del atentado, o como cómplices. Con oposición o sin oposición en la calle, esos interlocutores secretos habrían tenido que demostrar su inocencia a la sociedad española, al margen del principio de presunción de inocencia, que más de uno hubiera optado por escapar, al quedar al descubierto. La mayor parte de los españoles hubiera respaldado al gobierno. Es cierto que podía partirse en dos la sociedad española, si entre los detenidos hubiera habido algún opositor o mecenas de renombre, pero Aznar debía haber aceptado ese riesgo, reconociendo y poniendo a prueba la madurez de nuestra sociedad; de hecho, la sociedad española, hoy está partida en dos regiones, y ello, por la inacción de todos los gobiernos socialistas y populares de la democracia durante más de 35 años, y la acción de los nacionalismos vasco y catalán, que han utilizado el dinero y la generosidad de todos para crear división y miedo en sus territorios, y asqueo hacia lo vasco y catalán en el resto del país.

Entonces el PP no era partidario de cambiar el régimen, pero lo que son las cosas: un cambio de líder y ocho años en la oposición han inclinado el árbol a favor de los vientos políticos dominantes, la mayoría vientos traidores a España. Hoy, aunque ese partido siga defendiendo formalmente la unidad de España, en la práctica ha seguido la política del Partido Socialista en asuntos de tanto calado, que nos hacen dudar de sus manifestaciones en defensa del orden constitucional: Sortu y Bildu, las dos franquicias de ETA que Zapatero legalizó, siguen estando en las instituciones y han podido presentarse en las últimas elecciones, financiando cómodamente las estructuras de la banda terrorista con fondos públicos, y aunque el gobierno del PP actual niega cualquier negociación, ha mantenido la política socialista de excarcelar y acercar presos etarras al País Vasco; también ha mantenido al Tribunal Constitucional que lo hizo posible y no ha querido o no se atreve a modificar una Ley Electoral favorecedora de los intereses de nuestros enemigos. ¿Por qué no se ha permitido votar por correo en las elecciones vascas a los 250 o 300.000 vascos que han tenido que emigrar al resto de España para salvar la vida, mientras los que han emigrado al extranjero pueden votar por correo, entre ellos, los etarras huidos de la justicia. Entre todos los emigrados, serían una tercera parte del electorado vasco, que hubiera dado un vuelco los últimos resultados de las elecciones autonómicas, machacando al nacionalismo. Las escusas que dieron en su día los ministros de Justicia etc. del PP, no las entienden ni en su casa. Está claro que los nacionalistas van ganando, pero también está claro que nuestros sucesivos gobiernos centrales les han dando y les siguen dando muchas facilidades para hacerlo.

Lamentablemente, los atentados del 11M siguen sin ser esclarecidos. Ahora mismo, jueces, fiscales y el Ministerio del Interior están torpedeando los recursos del único condenado, que poco o nada tiene que ver con ese asunto -cualquiera puede darse cuenta, de que no es más que un cabeza de turco, uno de los muchos confidentes de la policía que fueron involucrados para desviar la atención, enturbiando así la investigación: tinta de calamar para ocultar la verdad. Eso quiere decir, que sigue sin haber voluntad de esclarecer el acto terrorista más grave de nuestra historia, crimen contra el gobierno de España y contra el PP, materializado en la clase trabajadora madrileña, que viajaba en unos trenes de cercanías y no tenían culpa de nada. Alguien los tomó como carne de cañón. Nos toman por tontos, y al final es que lo somos, por no reaccionar con nuestro voto, echando a toda esta patulea del arco parlamentario. Nos han representado muy mal y no nos defienden.

Hoy, los enemigos de España están por todas partes; lamentablemente, los hay dirigiendo la política nacional, territorial y local, que hasta las asociaciones de barrio y los colegios de los niños controlan. Los malos son pocos, pero suelen posicionarse muy arriba, cuando los buenos se desentienden. Los 1500 heridos y 192 muertos del 11M son muchos, pero no les han importado. Quien los mandó asesinar lo hizo por un buen fin: el suyo.

En cualquier crimen sin resolver, la policía investiga en el entorno que se ha visto favorecido por la sangre derramada. En este caso, la policía anduvo en otras historias. Está claro para quien lo quiera ver, que hubo tres partes favorecidas por el atentado del 11M. El primer interés a investigar es el del nacionalismo en general, que veía cómo ETA estaba siendo derrotada por el gobierno del PP, con la Ley en la mano, y que con esa derrota su proyecto de independencia se iba al traste; el segundo interés a investigar, es el del Partido Socialista, desesperado ante un horizonte negro, por los éxitos económicos de Aznar, que lo condenaba a seguir en la oposición cuatro años más -demasiados, sin poder manejar recursos públicos, de los que tanto disfrutan sus dirigentes cuando tocan poder-; y el tercer interés, el de un Marruecos dolido en su orgullo por el incidente de Perejil, al que se le presentaba en bandeja la oportunidad de vengarse de Aznar. Habrá quién niegue que los tres intereses colaboraron los unos con los otros para sacar rendimiento a las explosiones, pero errará. Hasta en la chapuza de sumario que instruyó un juez medio ciego, al que el diablo confunda y lleve pronto, se identifica a agentes diferentes en el atentado, todos ellos relacionados con los intereses descritos con anterioridad: ETA; cloacas del Estado con medios de comunicación relacionados con la oposición de entonces; y marroquíes ejerciendo de mulas, a los que sacrificaron sin piedad para destruir cualquier pista. El asunto es muy complejo y difícil de resumir.

El proceso giró en torno al explosivo utilizado: la recogida de pruebas fue una cadena de despropósitos, a pesar de lo cual, pudo probarse que el explosivo utilizado en las explosiones fue el habitual de ETA; las declaraciones de los técnicos estuvieron plagadas de irregularidades y falsos testimonios, pero las expectativas creadas por el Presidente del Tribunal, que aseguró que los falsarios "irían caminito de Jerez", en referencia al penal de esa localidad, esas expectativas se vieron rotas. La sentencia nos dejó a todos sin saber quienes fueron los autores intelectuales del atentado y tampoco los autores materiales, pues los que fueron condenados lo fueron por delitos ajenos al proceso, siendo ambos confidentes de la policía.

Las pruebas de que ETA estuvo detrás del atentado existen: el explosivo utilizado fue titadine, el explosivo habitual de ETA, y no goma 2, como intentaron colar por todos los medios los servidores  del nuevo gobierno socialista. Unas semanas antes del atentado, la Guardia Civil había detenido a un criminal de la banda con una furgoneta cargada de explosivos en Cuenca; y una tercera prueba, las imágenes de video de la estación (atentos cuando a partir del segundo 34 del vídeo aparece un joven fuerte con entradas). Un tiempo después pudieron identificarlo con nombre y apellidos: Asier Eceiza Ayerra, un etarra que escapaba con dos mandos a distancia en la mano. Este individuo está libre e imagino que duerme por las noches. En los telediarios de Antena 3, su imagen quedó tapada oportunamente: http://www.youtube.com/verify_age?next_url=/watch%3Fv%3DuIN7bz15Z-4 (ver el video completo y las explicaciones, que pueden convencer más fácilmente).

¿Quién urdió la trama?, ¿quién está detrás de tan oscuros objetivos?: había intereses muy claros que, a la menor oportunidad, se confabularon contra Aznar y el proyecto del Partido Popular, golpeándolos en los cuerpos de 1692 españoles, víctimas inocentes que iban a su trabajo en unos trenes. No somos tontos y podemos intuir quienes dirigían los hilos en esa historia. Se habló del lejano Ben Laden porque había moros implicados -sólo los entregados o sectarizados lo creyeron-, pero Aznar, con gesto serio y voz grave, volvió a dar pistas: "los que idearon estos atentados no están en desiertos remotos ni en montañas lejanas, sean quienes sean" No diga usted "sean quienes sean", que sabe usted mejor que nadie quienes fueron; usted sabrá por qué se empeña en empañar de cobardía su nombre y su trayectoria, callando lo que sabe. Los tontos de a pié sabemos poco, pero no se nos escapa que el nacionalismo vasco no nació solo y ETA mucho menos, que además de sangre, hay mucho lavado de cerebro y olor a santuario religioso detrás del nacionalismo y sus organizaciones criminales, religiosos que obedecen poco a Roma y que buscan convertir las provincias vascongadas en una nación dedicada a un santo moderno que fue soldado en el ejército castellano; en el nacionalismo catalán hay menos sacristía, que se rigen por los Utsages, versión antigua del Código de Comercio, sobre todo las más o menos 100 familias burguesas que explotan en su favor el cortijo catalán, ensucian la historia de España con mentiras y promueven el totalitarismo a través de politiquillos a sueldo a los que han encumbrado y protegido; detrás del socialismo por su parte, además de oportunistas que no han dudado en rapiñear las arcas públicas (lo siento por las excepciones que serán mayoría sin duda, pero en más de 20 años es la imagen que han dado), hay mucho humo, con gentes y poderes muy oscuros de corte radical y masón, que siguen atizando el fuego contra la Iglesia y contra la cultura cristiana en la que vivimos, a la que han intentado e intentan destruir. Hay quien afirma que han promovido un experimento social en España, a la que quieren destruir para convertirla en una sociedad sin valores. Tras los últimos años socialistas, esa sociedad sin valores está más cerca ¡Qué decir del vecino del Sur y su cortijo! Mucho lujo personal, a costa de un pueblo humilde que, o se conforma con vivir en la Edad Media o tiene que emigrar.

Si no hay justicia para las víctimas del 11M, y el poder judicial y los demás poderes del Estado no asumen su responsabilidad, peor para ellos: ya lo están pagando con su descrédito y con nuestro desprecio ¡Alguna vez, los que han hecho dejación de su deber, lo pagarán de otra manera, y espero que lo vean estos ojos! Aunque no haya nombres en esa trama…, los intuimos a través de las instituciones y partidos que han impedido en los últimos 8 años, y todavía impiden hoy, que se haga justicia, habiendo como hay evidencias tan claras. JUSTICIA PARA LAS VÍCTIMAS Y SUS FAMILIAS Y JUSTICIA PARA EL PUEBLO ESPAÑOL, al menos para los que hemos estado alejados de semejante carnicería, ofensa que hacemos propia.

Los resultados del 11M los tenemos a la vista: políticos catalanes traidores que piden la independencia en el momento en que nos ve más débiles, mientras derrochan el dinero común en embajadas inútiles, apoyo a la lengua catalana y acoso a lo español y a la lengua común, etc., todo, para echar a la sociedad catalana contra el resto de España tachándonos injustamente de ladrones; unas Vascongadas donde los nacionalistas ya copan todas las instituciones y pasa tres cuartos de lo mismo; y un vecino mal avenido en el Sur, amenazando nuestra soberanía, coaccionando a nuestro país y sacando tajada cada vez que intuye debilidad en nuestros gobernantes.

Muchos dirán que eso de la Patria les trae al pairo, que no es más que tierra y que por ella no están dispuestos a luchar. Yo les digo que no es sólo tierra, es la finca que dio de comer a nuestros padres y a nosotros mismos, y la que tiene que seguir dando de comer y cobijo a nuestros hijos y a nuestros nietos. Los que ahora se han constituido en nuestros enemigos no la desprecian, antes al contrario, la veneran, lo mismo que al trapo de bandera que se han dado los vascos, copiada de la bandera británica. Esa tela no tiene la historia ni los días de gloria y dolor de la bandera roja y gualda que tanto desprecian y que nosotros tampoco apreciamos en lo que vale y representa; por lo que se refiere a la bandera catalana, se trata de la vieja bandera del reino de Aragón, tierra noble y fiel a España. Esa gloria y ese honor que reclaman para sus banderas, lamentablemente y la gente no se da cuenta, tendrán que ganarlos con sangre, si quieren conseguir la independencia, pues la sangre es la moneda con la que se compra y se vende este tipo de mercancías. Los dirigentes catalanes, sobre todo las grandes familias burguesas, sí que lo saben, por eso atizan el sentimiento nacionalista de sus gentes a través de los políticos de Convergencia y de la Ezquerra y de los medios de comunicación locales y territoriales, para que sean las gentes exaltadas del pueblo llano las que pongan la sangre, enfrentándose a sus familiares, amigos y compatriotas del resto de España, mientras tanto, esos burgueses con sus familias, cuando estalle el conflicto, esperarán en hoteles de Suiza el resultado de su apuesta.

Ante la situación de gravedad que vive la sociedad española ¡qué importa la crisis o el rescate! Estamos arruinados y sabemos que nadie va a venir a rescatarnos. Lo importante en este momento es que están desmembrando a nuestro país y hemos de impedirlo, aprovechando para limpiarnos por dentro de corruptos. No penséis que son hermanos los que intentan la independencia, que ya no son tales: se han convertido en otra cosa, en inquilinos abusones que quieren hacerse los amos del común, pasando por encima del resto de vascos, catalanes y españoles todos. Quieren conseguir gratis un cortijo, para que nadie les pida cuenta de sus tropelías, pues entonces tendrán vía libre para esclavizar a los que pillen en sus dominios y montar su paraíso fiscal, convirtiendo a Cataluña en otra Andorra.

Veremos qué hacen los sindicatos y partidos de la izquierda, tan amigos de salir a la calle a hacer manifestaciones, además de tomar cerveza y marisco, y de qué lado se ponen en un negocio donde no hay ideología, dinero, ni subvenciones, y lo que nos jugamos todos es la tradición, la familia, el orgullo, y también la vida. Estarán a lo suyo: a cubanizar España, para ejercer ellos de Fideles en los múltiples reinitos Taifas, mientras nos matan de hambre a los demás.

El 11M no terminó en un cambio de gobierno, buscaba el debilitamiento y la desintegración del País, y todo eso ya lo estamos viviendo. Si al final un gobierno con mayoría absoluta no sabe qué hacer o no se atreve, limitándose a tomar la postura de don Tancredo, tendremos que ser los ciudadanos los que enfrentemos la situación una vez más, como ya lo hicieron nuestros abuelos en la Guerra de la Independencia, cuando fueron traicionados como pueblo por los reyes y por la nobleza española, que se pusieron del lado del invasor napoleónico. Que no espere este gobierno y arregle pronto el problema, y que se ponga pronto en cabeza a la defensa de España, aplicando la Ley sin reblar. Acabo de oírle decir al Sr. Rajoy que lo único que puede hacer es dialogar. ¿Dialogar con quien no tiene interés en entrar en razón? Que se plante, que si no lo hace, esos políticos desaprensivos echarán a los humildes al enfrentamiento y a la nación a otra guerra civil. Los que han estado a lo suyo, confiando en los políticos de uno u otro signo, viendo este desastre, acabarán organizándose y echándose a la calle, pero igual es tarde, aunque, si lo hacen, no habrá misericordia, ni marcha atrás, sólo violencia. Lamentablemente, son situaciones complejas y las consecuencias impredecibles.

Esto no es invitar a la sedición, sedición es lo que hizo un consejero catalán el otro día amenazando con utilizar a los Mozos de Escuadra en favor de Convergencia, si el gobierno de España intentaba algo contra ellos -aún estoy esperando la reacción de mi gobierno y de la fiscalía acusándolo de sedición-, lo mío es invitar a defender lo nuestro: lo más sagrado, el patrimonio heredado de nuestros mayores -algunos lo llamarán la patria en peligro-. Y es que hay que estar dispuestos a todo, que Cataluña y Vascongadas son España, y los que viven en ellas son españoles. La única voluntad que vale en este negocio es la voluntad de todo el pueblo español: el único dueño, el único que puede decidir. El gobierno debe ponerse al frente y defender la Constitución, al pueblo español, y a la integridad territorial de España, y hacerlo contra cualquier enemigo interno o externo, y con todos los medios a su alcance. Para eso, que cuente con mi vida y con mi hacienda, para seguir dando vueltas, que las den solos.

Esperemos que no sea el Pueblo Español el que tenga que solucionar el problema generado por el 11M, desgracia que nos trajo a Zapatero y con él 8 años de ruina y destrucción, porque lo hará como en la Guerra de la Independencia: sin cuartel. Que no lo tienten pensando que seguirá pastando, que este pueblo, aunque sea manso, arrancará corneando sin piedad a cualquiera que se ponga por delante.

El Rey en este caso "esta, pero no se le espera", pues emitió un mensaje conciliador y los independentistas le dieron por todos lados. El Príncipe ha ido diciendo "que el problema no es Cataluña" y tiene razón, que el problema es el gobierno catalán y su partido Convergencia. El ejército estará preocupado e imagino que esperando órdenes. Rajoy, KO Esperemos que al final se arranque y cornee embolado con la Constitución y con el Código Penal. Que lo haga pronto, que si no, otros menos templados embestirán sin bolas, que esos otros no están tan lejos, que algunos olvidan, que en Cataluña, más de la mitad de la población quiere seguir siendo española. Una población acosada y perseguida que está harta de sufrir los abusos e imposiciones de los nacionalistas.

Se pide cordura a los de siempre. Que se la pidan a los que atacan la libertad en Cataluña y que nos amenazan con la independencia; que le pidan cordura a los que engañan a los catalanes durante 24 horas a través de ingentes medios de comunicación, entregados al poder nacionalista; que les pidan cordura a los que cuentan a los catalanes que tras la independencia serán más ricos, cobrarán más pensión, seguirán en la Unión Europea, en la OTAN y en el Euro, les tocará la lotería, ligarán más, vivirán más años y les crecerá el pelo a los calvos. Mentiras y MAS, todo mentira.

El 11M ha tenido muchas consecuencias negativas y sigue teniéndolas: se dice, que si no hubiera habido crisis, los nacionalistas no hubieran planteado la independencia. Aunque la crisis haya influido,  no ha sido decisiva: estamos en crisis desde antes del 2007 y hay indicios de que estamos comenzando a salir de ella; si plantean ahora los convergentes la independencia es porque ven que con este gobierno no rascan bola (ya no les han dejado influir en los presupuestos, como en años anteriores); en la huida independentista de estos caganet, la recuperación de España no favorece a sus propósitos, considerando los muy ruines que la coyuntura actual de debilidad del Estado es más adecuada para pedir la independencia y, además, se han tomado en serio que la sociedad española se está planteando un cambio de régimen, pero este régimen no es el de Aznar, cuestionando con mucha fuerza promover un cambio constitucional para liquidar el Estado de las Autonomías, derrochador y desintegrador. Ahí está el movimiento RECONVERSIÓN, que no ceja, y que nos pide nuestra colaboración y apoyo:


La plataforma reconversion.es ha organizado un acto público por la reforma del Estado, al que convoca a todos sus adheridos y seguidores, el próximo 12 de noviembre a las 19.00 en el Hotel Intercontinental de Madrid, (Paseo de la Castellana, 49) con el siguiente programa:
19.00Apertura
José Antonio Ortega Lara
19.10Estado de Derecho e Instituciones
Adolfo Prego
19.25Estructura territorial del Estado
Santiago Abascal
19.40Modelo productivo, déficit público y sistema de protección social
Rubén Manso
19.55Sistema de partidos y sistema electoral
José Luis González Quirós
20.10Cierre
Alejo Vidal-Quadras




martes, 16 de octubre de 2012

En nuestro país se ha declarado delito negar el Holocausto Judío.-


Uno se pregunta en su escasa ingenuidad: ¿qué ha cambiado para que este gobierno incluya entre los delitos del código penal un delito tan singular como negar el holocausto judío? Sin duda, lo que ha cambiado es el gobierno de España, que el amigo ZP, con el torpe gesto de ponerse un pañuelo palestino, consiguió echar abajo el trabajo de todos los gobiernos españoles anteriores al suyo, incluidos los de Franco, de mimar la amistad con los judíos y, una vez reconocido el Estado de Israel, mantener buenas relaciones con él.


No es momento para presumir de cultura, pero no está demás una pincelada para recordar que los españoles estamos muy vinculados desde la más remota antigüedad con el pueblo judío: hay quien defiende que “hebreo” viene de “ibero” ¿Es posible? ¡Lo es!: sefardita también significa oriundo de Sefarat, el nombre que daban a España los españoles de religión judía que fueron expulsados en 1492. ¿Quién puede negar con seguridad que en la lejana antigüedad, israelitas procedentes de Iberia retornaran por una u otra causa a Israel, conservando el nombre de íberos o hebreos para distinguirse de los demás israelitas, convirtiéndose en uno de los nombres con los que eran y son conocidos? Y es que los pueblos fenicios comerciaron con el reino de Tharsis y tuvieron colonias en nuestro suelo patrio, donde sin duda hubo israelitas comerciando junto al pueblo filisteo (el nombre que da la Biblia a los antiguos fenicios). Como suele decirse, vecinos y compatriotas mal avenidos. 



Al margen de ZP, “que mala ... le den, por la ruina en que nos ha dejado”, me preguntó: ¿por qué un detalle de acercamiento como éste a los judíos, y en este momento? Creo que está claro: este gobierno necesitaba de un detalle con Israel que fuera impactante, buscando con él recuperar el terreno perdido por culpa del más oscuro personaje de nuestra historia, el tal ZP. 



Lo de menos es la prohibición penal de negar el holocausto, delito que será de escaso uso ante los tribunales españoles; lo importante para nuestro gobierno es el acercamiento a los judíos, por el poder del que disfrutan y por la importancia que estos dan a su holocausto; lo peor para nosotros, los españoles, es que, incluir semejante delito en nuestro Código Penal supone un recorte en los derechos constitucionales de expresión y de opinión, recogidos también entre los Derechos del Hombre. Imaginemos que un historiador demostrará que el holocausto no existió. Pues bien, gracias a un artículo del Código Penal Español ese historiador no podría publicar sus investigaciones en España porque podría ir a la cárcel. Este asunto queda censurado. Me pregunto también que en los 66 años transcurridos desde la terminación de la Segunda Guerra Mundial, más de un libro se ha publicado al respecto, y más de un artículo periodístico ha habido cuestionándolo. A esos no les va a pasar nada, pues no se les podrá aplicar esta norma, ya que, cuando publicaron su trabajo, negar el holocausto no era delito. Hacia ellos deberían dirigir sus argumentos los holocaustistas para  convencerlos y dejarnos en paz a los demás. ¡Cosa curiosa! En unos países negarlo es delito y en otros no.

Recuerdo a un profesor de filosofía, que era germanófilo, pero también muy pragmático. Para chincharle, un compañero de doce o trece años le soltó: “Padre Miguel: los nazis fueron unos asesinos, que me enterado de las cosas que hicieron”. "¡Qué sabrás tú!" -Le respondió el religioso, sin hacer aprecio al comentario ni extenderse en dar ninguna explicación, pero al poco, dejaba caer con cierta sorna: “la historia la escriben los que ganan las guerras. No hagáis caso de todo lo que os cuentan". -Y continuó: ”Para llegar a conocer la verdad es necesario buscar respuesta a tres preguntas: ¿Quién lo dice?, ¿de quién lo dice? y ¿por qué lo dice? Cuando tengáis respuesta cierta a esas tres preguntas os acercaréis al conocimiento de la verdad"

Y es que los historiadores demuestran cada día, que muchos hechos del pasado no acontecieron como nos los han contado. Pues cuando una gran guerra concluye, comienza otra diferente, que es la guerra de la propaganda, y quien gana la guerra de la propaganda pasa como vencedor y santo a los libros de historia. Los historiadores honrados tienen por delante una gran labor si quieren que las gentes conozcan una aproximación la historia real y no la tanda de embustes que estudiamos. Pero mucho me temo que el revisionismo no se tolera mucho en el mundo editorial, las cosas van por favorecer a los del calentamiento climático y otras tonterías, que dan mejores dividendos… a algunos.

Ejemplos de deformaciones o mentiras en la historia los hay a miles. La historia de Nerón sobre el incendio de Roma simplemente es falsa. Los historiadores romanos de ese tiempo demostraron que odiaban a Nerón. Nerón se encontraba veraneando en Ancio cuando se produjo el gran incendio en Roma, que pudo originarse en unos almacenes de aceite que había cerca del circo Máximo. Nerón acudió rápidamente a Roma cuando se enteró del hecho, y se puso a organizarlo todo: abrió los jardines imperiales, el campo de Marte y otros, donde dispuso cobertizos para refugio de los romanos que se habían quedado sin casa; rebajó el precio del trigo; visitó las instalaciones y se preocupó por el estado de las personas y de los barrios afectados, abriendo cortafuegos. Pero los efectos devastadores del incendio, y la propagación del infundio de que Nerón había ordenado quemar la ciudad, caló más en los cives romanos que la verdad. Todos le consideraban lo suficientemente loco como para ordenar el incendio de Roma. En esa situación, no es extraño que Nerón tirase por la calle de en medio y se inventara un nuevo enemigo, para desviar la ira de los romanos. En realidad, Roma ardió un 18 de julio del 64 por un hecho casual, al que se unió el viento en un verano caluroso. Sin duda, la mala urbanización de la ciudad, donde eran habituales los incendios, y el caos que sobrevino, hizo el resto. Nerón aprovechó la ocasión para planificar una nueva ciudad donde prohibió la construcción de casas altas de madera, con calles más anchas que sirvieran de cortafuegos, y tomó medidas radicales para que el agua corriera por toda la ciudad e impedir que en futuros incendios ocurriese lo mismo. Pues bien, lo que nos ha llegado, es que Nerón mandó quemar la ciudad para construir una nueva, mientras, desde lo alto de la torre Mecenas en el monte Palatino, recitaba versos alusivos a la destrucción de Troya, tañendo su lira. Esto último es cosa del cine. 

Por poner otro ejemplo cercano al anterior de cómo influye la propaganda sobre los hechos históricos, comentar uno que, una vez analizado a fondo, resulta ser una mentira como una casa: se trata de las famosas persecuciones contra los cristianos. Si nos atrevemos a quitar la emoción propia del victimismo a las persecuciones que sufrieron los cristianos en Roma, comprobaremos que, a excepción de la persecución de Nerón que acusó directamente a los cristianos de incendiarios, las demás persecuciones no iban expresamente dirigidas contra los cristianos. En Roma no se perseguía a los ciudadanos por el hecho de practicar una religión contraria a la religión oficial, se producía la persecución por la negativa de algunos ciudadanos a obedecer las órdenes puntuales del emperador de turno. El hecho de practicar una religión diferente no era causa penal en aquellos tiempos, donde la libertad religiosa existía. El Imperio estaba lleno de dioses diferentes, estando previsto, para evitar que ningún dios se sintiese postergado, el culto al dios desconocido. Pero ese sistema de libertad religiosa convivía con un régimen político autoritario, donde no se podía cuestionar la autoridad imperial. El emperador era considerado autoridad indiscutible, a la vez, pontífice máximo y dios viviente; en ese contexto, era delito negarse a quemar incienso por el emperador y por los dioses. No se le pedía a nadie que renunciara a su dios, se le pedía acatar la voluntad más o menos razonable del emperador en cuestión. Además, por respeto, en el bando de los dioses ninguno debía quedar discriminado, de manera, que lo oficialmente correcto era que los ciudadanos quemasen incienso por su dios y por el dios de los demás, haciendo votos a su vez, por el emperador. El ciudadano que se negaba a quemar incienso a los dioses –siguiera la religión que siguiera- incurría en delito, pero no era castigado por ser cristiano, pagano o judío, ni era castigado de cualquier manera, sufría la pena prevista por la Ley. Las distintas persecuciones tuvieron lógicamente sus propias peculiaridades, dado que transcurrieron muchos años entre una y otra y fueron emperadores diferentes los que las impulsaron. Hasta los judíos tuvieron su propia persecución por contrariar al emperador Domiciano, que les exigió que aportasen al erario público la ofrenda que mandaban anualmente al templo de Jerusalén, ya que el Templo había sido destruido por Tito y ya no existía.

En este asunto, se intuye cierto interés de la Iglesia en imponer el número 10 como el número de persecuciones que hubo contra los cristianos, imitando las plagas de Egipto y otras citas bíblicas; aunque no todos los autores están de acuerdo en esa cifra. De las persecuciones mencionadas, varias de ellas no iban dirigidas específicamente contra los cristianos; y habría que añadir a las anteriores persecuciones las que tuvieron lugar después del edicto de Constantino, contra los cristianos discrepantes de la doctrina oficial -tan sangrientas o más que las otras, sin duda-, pero los perseguidos ya no serán calificados por la Iglesia como mártires, sino como herejes, y también habría que incluir como persecuciones, las que se practicaron a partir del triunfo del cristianismo, contra los resignados paganos, que veían como una intransigencia religiosa creciente se volvía contra ellos, que comenzaban a ser perseguidos por el nuevo Estado Cristiano, por negarse a abandonar sus creencias en favor de un único dios. El monoteísmo trajo muchos cambios y mucho dolor para los habitantes del Mediterráneo, que respetaban las tradiciones paganas del Viejo Imperio Romano, pero de esas persecuciones no se dice nada, se callan, como se hicieron callar a todos los autores que defendían el paganismo frente al cristianismo, cuyas obras y las de sus apologistas han sido destruidas y ninguna ha llegado a nuestro tiempo. Ha llegado el nombre de un pagano llamado Porfirio que conseguía poner en aprietos a la Iglesia de entonces, empeñado en dejar al aire sus vergüenzas. Si hoy la Iglesia tuviera aquél poder, la disquisición de este pobre bloguero podría conducirlo a la hoguera. ¿Hubo mártires cristianos? Sin duda los hubo, pero ¿persiguió Roma a los cristianos por ser cristianos? No, sólo Nerón los persiguió por esa causa, que los acuso del incendio de Roma para quitarse de encima los rumores que lo señalaban a él como autor del incendio. Las demás persecuciones contra los cristianos fueron puro victimismo, que los demás ciudadanos del Imperio también las sufrieron y, o no se quejaron, o no transcendieron sus quejas. La Iglesia cristiana, sin embargo, las ha manipulado en su favor durante cerca de 2000 años.

En nuestra propia historia hay casos a mansalva: el más cercano que tenemos los españoles es nuestra última guerra civil, que, ganándola Franco en el frente de batalla, al final la perdió por la propaganda. Sus enemigos supieron transmitir a las generaciones posteriores una gran mentira: que ellos eran demócratas y que Franco se alzó contra la República, como modelo de democracia naciente. La realidad es que esos que se invistieron de demócratas, en el año 34 se rebelaron contra esa República a la que tanto alaban porque habían perdido el poder en la urnas; después, cuando en febrero del 36 volvieron a ganar las elecciones, se cargaron la II República, iniciando el camino hacia un régimen totalitario, que era su verdadero objetivo. La sociedad española de aquel tiempo, entre febrero y julio del 36, veía con estupor cómo los poderes del Estado promovían el terror y destruían el Estado de Derecho, terminando por asesinar al jefe de la oposición. Ese hecho llevó a un grupo de militares a levantarse contra el gobierno del Frente Popular para impedir que la revolución estalinista anidara en España. Que eso condujo –guerra por medio- a una dictadura de más de 40 años… Es cierto. Pero la otra opción hubiera sido la dictadura del proletariado (un mundo de esclavos al que sigue queriendo  llevarnos la izquierda radical de nuestro país). Los países de Europa que cayeron en semejante dictadura estuvieron atrapados hasta la caída del muro de Berlín, sufriendo, además de la restricción de libertades de todo tipo, un retraso social, económico y moral de muchos años. El régimen de Franco no supo remachar la victoria ganando la batalla de la propaganda, por eso los españoles lo recuerdan hoy como el dictador que fue y no como el salvador de un modo de vida, de unas creencias y de una cultura propia. Eso costó sangre. Pero nunca sabremos la sangre que se hubiera derramado en España si la guerra del 36 la hubieran ganado los otros en el campo de batalla, esos a los que invisten sin ninguna desvergüenza de buenos republicanos y de demócratas. Sin contar, que España hubiera sido un campo de batalla más en la Segunda Guerra Mundial, pues habría sufrido la invasión de los alemanes, una guerra de  guerrillas, y la posterior invasión de los aliados para liberarla.

¿Más ejemplos? No creo que hagan falta: no acabaríamos nunca de revisar la historia.

Pues bien, centrando el asunto, todos los que venimos al mundo, necesitamos que un profesional que dé fe de los hechos del pasado. No tenemos por qué fiarnos de la versión de la historia que cuentan los que ganan las guerras, que siempre intentarán justificarlas y justificarse, demonizando al enemigo. Y no tengo nada contra los judíos, ni tengo por qué dudar del holocausto, pero que mi gobierno decrete que si lo niegas incurres en delito no me ayuda a creer. 

Comprendo que mi gobierno esté interesado en hacer buenas migas con el poder judío y yo en eso estoy con mi gobierno, pues todo vale para salir de la crisis. En estos momentos estamos inmersos en un tipo nuevo de guerra -en este caso se trata de una guerra económica entre el Dólar y el Euro, guerra promovida por los dueños del Dólar. Pues bien, los dueños del billete verde -lobbys ellos- nos están acosando con sus Agencias de Calificación o de Rating y sus ataques a la deuda española y a nuestra bolsa, pero no lo  hacen por inquina personal, sino porque ser el flanco débil de la zona Euro. Si esta jugada de apoyo al holocausto sirve para que nos perdonen un poco, bienvenida sea, pero me temo que no sirva de mucho: fuera del mundo de la diplomacia y de las relaciones internacionales, la economía española es un objetivo menor para el enemigo, su objetivo principal es la destrucción del Euro. Los dueños del mundo no quieren competencia en su negocio principal, que es el Dólar, la divisa por excelencia que se ha visto desplazada por el Euro. Si no pueden destruirlo, harán lo posible para apoderarse de él ¡Y ya están en ello!, Draghi es de los suyos, lo mismo que muchos de los dirigentes de la Unión Europea, que acabarán traicionándonos. 

Volviendo al holocausto ¿Existió el holocausto judío? La realidad es que yo no estuve allí, por lo tanto, no puedo afirmarlo ni negarlo; además, cualquiera se atreve a decir que no existió..., lo que siento es que ataques genocidas a otros colectivos no tengan la misma denuncia y la misma consistencia, como el genocidio de los republicanos españoles que salieron de España en 1939 y acabaron en campos de concentración, el de los gitanos, el de las personas con síndrome de Down, el de los miles de enfermos mentales, etc., etc. También se olvida que hubo genocidios varios en la Rusia de Stalin, que se sabe que antes y después de la 2ª Guerra Mundial llevó a cabo una política anti judía radical y sangrienta. No entiendo por qué se lo perdonan. En las revoluciones marxistas que se originaron por todo el planeta hubo millones de muertos y, por terminar con esta triste historia, recordar el genocidio que la ONU consintió en Ruanda en 1994, que casi acaba con el país, y el último, no por silencioso menos importante, el genocidio que se está extendiendo por todo el planeta promoviendo la legalización del aborto. A millones de seres humanos, a los más desvalidos, se les está asesinando con la ley en la mano en trituradoras de elegantes clínicas. Pronto se asesinará a los ancianos aludiendo a que originan muchos gastos al sistema de salud… ¿A qué dios ofrecen estos sacrificios los que promueven el aborto y otras prácticas criminales, como es utilizar como cobayas de nuevos medicamentos a los más desvalidos? 

Quien niegue estos genocidios, que se lo haga mirar, pero que esté tranquilo: nadie lo va a procesar por negarlos, convirtiendo la negación en delito.

¡Ah!, un detalle para finalizar y terminar de liarla: Dicen que holocausto significa sacrificio, una palabra que hace referencia a los sacrificios que los antiguos ofrecían a sus dioses, normalmente animales que eran consumidos totalmente por el fuego. Cuando se ofrecía un sacrificio de 100 animales, se convertía en hecatombe. Con ese bagaje histórico, las autoridades religiosas judías deberían haber elegido otra palabra más apropiada para definir el asesinato de los suyos por parte del régimen nazi. Tan exquisitos a la hora de hilar fino, deberían haber entendido que los nazis, si cometieron genocidio contra ellos, no lo harían como sacrificio a ningún dios, lo harían para exterminarlos. Tampoco la idea de quemar los cadáveres hasta dejarlos en cenizas parece responder al objetivo de un sacrificio, como es que el humo ascienda por los cielos hasta llegar a algún dios, la idea, de existir, sería más simple: librarse de los cadáveres y hacerlos desaparecer aplicando técnicas industriales. 

Así pues, no se puede negar el holocausto judío en España porque lo dice la Ley, pero aquellos asesinatos colectivos, si los hubo, deberían haberlos tipificado desde el principio como un genocidio y no como un holocausto, que es otra cosa. Si las autoridades judías lo conceptuaron como holocausto, para ellos queda, pero no se puede meter en un Código Penal un delito sin acotarlo y definirlo con toda precisión, que la pena por un delito no es ninguna broma. El que la haga que la pague, y que no pueda escabullirse, por falta de rigor de un legislador débil y chapucero, negando el delito mediante un artificio tan sencillo como el descrito, diciendo que, si existió el holocausto, no fue holocausto sino genocidio.

En cualquier caso, no nos impiden creer o no, que es algo que queda en el interior de cada cual; además, lo de creer por creer es cosa de fe, y la fe no todo el mundo la tiene o la merece. La verdad, sea la que sea, no la sabremos; de las tres preguntas del filósofo, conocemos sólo dos: ¿quién lo dice? y ¿de quién lo dice? Nos falta conocer la tercera: ¿por qué lo dice? Si alguna vez conocemos la tercera respuesta podremos afirmar o negar, lo que no sé es si nos dejarán. De momento, no.




miércoles, 26 de septiembre de 2012

Intentan tomar el Congreso ¿Quién está detrás?


Ni siquiera hace un año que los españoles elegimos a nuestros representantes para el Congreso y el Senado. Prácticamente al día siguiente comenzaron a anunciarse movilizaciones de todo tipo contra el gobierno entrante. Dicen que en lo que va de año se han producido en Madrid más de 2000 manifestaciones, a una media cercana a las 7 manifestaciones por día.

La izquierda que padecemos, muy progre ella, es así de demócrata: cuando gobierna nos arruina y cuando pierde las elecciones se echa a la calle intentando recuperar lo perdido, y ya de paso, desgastar al gobierno. Lo de hacer una leal oposición es para los ingleses. Aquí están convencidos de que sólo ellos están legitimados para gobernar, pues son los únicos y legítimos representantes del pueblo. Los demás, no somos personas con derechos, somos fachas.

Pues bien: ayer un grupo de totalitarios facciosos, arrogándose la soberanía popular, rodearon el Congreso pidiendo la dimisión de todos, gobierno incluido. Curiosamente, esas gentes se declaran de izquierdas, y aunque llaman fachas a los demás, son ellos los que con un pensamiento totalitario puro y duro, practican el fascismo. Algunos sabemos que los extremos se tocan y que el fascismo y el comunismo sólo se diferencian por su base cristiana o atea. Ellos, como son víctimas de la LOGSE, ni eso saben.

No sé quién está detrás de estos facciosos, pero viendo a algunos representantes de IU y del PSOE pedir respeto para ellos, a uno se le abren las carnes pensando que esos grupos son socialistas y comunistas. Lo que no entiendo cómo no les hacen caso y todos estos representantes de la izquierda comprensiva con estos golpistas no han dimitido a esta hora haciéndoles caso para dar ejemplo a los demás. Cayo Lara: ¡dimite!, ayer te vi salir del Congreso para dar ánimos a los convocados, que pedían tu dimisión y la de  los demás diputados. ¡Hazles caso!, que nos harás un favor a todos. Gaspar: he visto tus declaraciones pidiendo la dimisión de la Delegada del gobierno. Se ve que querías que los concentrados entraran en el Congreso para proclamar la Tercera República Popular. Vete a Cuba y dedícate a la medicina, a ver si eres capaz de curar a Castro. En Corea del Norte también estarás en tu salsa. ¡Desagradecido! Da ejemplo y ahórranos tu salario, que gracias a esta democracia que tanto odias comes caliente.

Aunque yo también estoy descontento con la clase política y con el gobierno, no estoy conforme con este tipo de actos. Entiendo que si estamos en una democracia, debe respetarse la voluntad de 25 M. de españoles que votamos en noviembre de 2011 un cambio político. Otra cosa es que en las próximas elecciones vote a otro partido que diga defender la unidad de España o que me manifieste porque me parezca mal algo. Pero nunca gritaré consignas contra la democracia que me da la libertad que tengo.

Tampoco entiendo la comprensión que piden algunos políticos con esta gentuza, a la que llaman pacífica, que van con la mochila llena de piedras.

Que la fiscalía y el CNI investigue a esta gente y los desenmascare a todos. Que se sepa quién     los ha echado a la calle, que se sepa de una vez. Con el arruina patrias de Zapatero no había manifestaciones políticas en la calle. Si hay partidos políticos y sindicatos que reciben subvenciones, quiero estar seguro de que están a lo suyo y no se dedican a la lucha callejera en contra del gobierno que nos hemos dado. Si no les gusta el gobierno porque no es de los suyos, que se jodan como nos jodemos todos, que lo nuestro hemos pasado con el arruina patrias de Zapatero, al que por cierto, en ocho años de dislates, nunca cuestionaron.

Indignados estamos todos, sobre todo los que vemos venir la ruina de España de la mano de IU y del PSOE, que no está dispuesto a hacer frente al independentismo, el gran problema de España. En su lugar, se dedican a justificar y seguramente a organizar a esos follones contra la soberanía popular, representada en el Congreso de los Diputados, debilitando a España.

Han aprovechado los años de democracia para crear una red clientelar, que en estos momentos, les sirve a partidos y sindicatos para organizar manifestaciones, en función de sus necesidades, para manipular la realidad. Hay que desenmascararlos. En este caso, al PSOE e IU, a UGT y a CC.OO. que han hecho causa común contra la democracia española. Los llamados "indignados" son los cachorrillos y no tan cachorrillos de esta gente que no es de fiar.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Se quieren cargar la nación española y parece que van en serio.-


La pasada semana ha sido de gran preocupación para todos aquellos que nos sentimos españoles. El nacionalismo ha dado un paso hacia adelante promoviendo la independencia de Cataluña. Nada extraño por otra parte, dados los antecedentes y las expectativas que les dio el Presidente anterior, el extraño Zapatero, que les regaló la reforma del Estatuto Catalán en perjuicio de la Constitución Española. Ni se lo creían.

Los que conocemos los entresijos de la historia y sabemos leer entre líneas en los acontecimientos históricos podemos deducir:

“Que nuestros enemigos, los viejos enemigos de España, están consumando su venganza”.

Pero, ¿quiénes son nuestros enemigos?, y ¿de qué se tienen que vengar? Iremos desgranando lo que podamos.

Nuestros enemigos vienen de lejos, hay quien eleva la fecha de la enemistad al 711 e incluso antes, con las guerras de religión, aunque pasarán a ser enemigos irreconciliables en 1492, con las expulsiones. Que no, que es imposible ¡Ojalá lo fuera! Pero desde entonces, cada vez que flaqueamos, ahí están para ayudarnos a caer o impedir que nos levantemos.

La última decisión dramática aconteció en los años 30 del pasado siglo, cuando alguien, asentada la revolución marxista en Rusia gracias a la 1ª Guerra Mundial, desde la sombra, decidió que la República Española se convirtiera al marxismo estalinista, para coger a Europa en una pinza. El enemigo no era Europa en sí, era la iglesia Católica y las naciones que aceptaban su dominio, que eran vistas por los que se consideran amos del mundo, como un impedimento al avance e implantación del comunismo y del ateísmo que apadrinaban. Estas naciones (Italia principalmente) intentaron superar la situación a través del fascismo, que era un socialismo con raíces cristianas. El fascismo que surge en Italia pronto tuvo sus réplicas en muchas naciones, no sólo europeas, y en cada nación tomó su propia forma.

España, tras la revolución de Asturias, unos meses de desórdenes y falta de Estado de Derecho con el Frente Popular, los nacionalismos emergentes, y una guerra civil de 3 años, pudo evitar el experimento marxista. Pero ese enfrentamiento entre comunismo y fascismo no tardaría en enfrentar a Europa.

Habrá quien piense que no tengo ni idea, pues, analizando la naturaleza de los contendientes de la 2ª Guerra Mundial, dirá que los comunistas y las democracias anglosajonas luchaban en el mismo bando. Tendrá razón, pero yo voy más allá: también luchaban en el mismo bando la Rusia zarista, Francia e Inglaterra en la 1ª Guerra Mundial y mira lo que hicieron sus aliados por el Zar cuando se lo cargaron los comunistas. El comunismo fue un experimento que pusieron en marcha esos que trabajan desde la sombra con financiación ilimitada, y que están en condiciones de dominar el mundo, manejando a grupos humanos, organizaciones y naciones enteras en su exclusivo provecho. En ese momento los señores de la historia entendieron que capitalismo y marxismo, plantas que comparten las mismas raíces, debían ir de la mano para acabar con el enemigo común: el fascismo y lo que representaba. Tiempo tendrían de demostrar cada uno por su lado la bondad o maldad de su receta en perjuicio de la otra, a la hora de dominar a los hombres, que es de lo que tratan estos experimentos.

La Iglesia que favoreció el fascismo saldría sin duda trastocada en este negocio. Aunque, vencido el fascismo, siga en pié, de hecho, tras la Segunda Guerra Mundial, ha perdido su autonomía y es una organización doblegada a los intereses de esos hombres que cultivan el secreto. No hay más que ver la sumisión de los Papas y la mansedumbre de sus reformados cánones. Hoy el Papa no se molesta en disimular gestos en los saludos, gestos que delatan su condición ajena a la Iglesia a la que representa.

Pues bien, esos enemigos no perdonan a nuestro país que sus planes se vinieran abajo en el año 39, añadiendo un desprecio más a su alforja. Es cierto que en los años de la dictadura no se mostraron agresivos, quizás porque el dictador supo ganar tiempo a su irremediable venganza, con gestos de protección a los suyos -que agradecieron- y con la apertura del país a su religión y a sus gentes.

Pero los tiempos de fortaleza han pasado, llegando años de vacas flacas. Esa oportunidad la facilitaron estos y otros enemigos -enemigos nos sobran-, que permitieron que fracasara la sucesión de Aznar, facilitando la llegada de Zapatero, para traer la ruina de España. Y es que hay que ser muy tonto para pensar que Zapatero es una casualidad de la historia. Es imposible hacer tanto daño a una nación, salvo que las equivocaciones sean premeditadas. Arruinada y debilitada España, tenían que surgir las reivindicaciones nacionalistas, como tenían que surgir las reivindicaciones marroquíes que se están dando por Perejil, Alborán, Ceuta y Melilla.

La ruina no ha venido sola, como no vino solo el atentado del 11M. Todo lo han propiciado los enemigos de España.

Siendo cierto todo lo anterior, hay que reconocer con tristeza que los viejos enemigos que tan poco nos favorecen y que tanto han odiado a nuestros antecesores y a nosotros mismos, con razón o sin ella, no son los peores. Nuestros peores enemigos no son externos, son nuestros propios políticos, nacionalistas o no, socialistas o populares, y nosotros mismos, que teniendo tantos motivos, todavía no los hemos echado sin contemplaciones (no me refiero a apalearlos, sino votando a la contra, votando a partidos que hoy por hoy son minoritarios pero que dan buena imagen y aparentan limpieza). Todos ellos cedieron el poder a los nacionalistas, fundamentalmente la educación y los dineros; todos ellos han consentido que en Cataluña se incumplieran las leyes y las sentencias que reconocían a los padres el derecho a que sus hijos fueran educados en Español; todos han dejado que engañaran y envenenaran a varias generaciones de jóvenes, con mentiras sobre España y los españoles. Gracias a sus torpezas, los que hace 30 años cabían en un taxi, hoy son cientos de miles. Lo mismo de Cataluña sirve para las provincias vascas y para otras regiones de España como la comunidad valenciana, gallega y mallorquina, donde se niega a la población la educación de sus hijos en español.

Con tanta desgracia, uno no puede más que dar crédito a los que piensan que hay un plan para deshacer España. Así lo reconocen algunos, cuando afirman, que hay un experimento en marcha que busca convertir a España en una sociedad sin valores. La falta de valores va de la mano de una mala enseñanza, y ésta es un hecho. Recuperar esa enseñanza llevará muchos años y no se si habrá tiempo para que las próximas generaciones de españoles recuperen el cerebro.

Por eso no nos queda otra que echar a los nacionalistas de las instituciones que manejan, suspendiendo las autonomías ya, y propiciando una reforma drástica del Estado. Pero no será así, los que nos gobiernan son nuestros peores enemigos, y así como las cortes franquistas no dudaron en hacerse el harakiri por el bien de España, estos no lo van a hacer. Piensan demasiado en ellos mismos. A esto hay que añadir la sospechosa circunstancia de que Zapatero sea miembro de una logia masónica irregular y la no menos sospechosa circunstancia de que Rajoy haya podido ingresar en la masonería, como pago para poder subir al poder. Su estancia en Mejico hace pensar a algunos que pudo ser así. La masonería es una organización mundial diversificada en varias obediencias que no es ajena al poder con mayúsculas. 

Con semejantes enemigos internos, para qué preocuparnos de los otros, de la masonería de siempre, le basta con dejarnos hacer, que entre todos mataremos a España y ella sola morirá. Los políticos nos pondrán la cabeza caliente y los bolsillos vacíos sin necesidad de maquinaciones externas. Por eso no gastemos más saliva y directamente...

ECHÉMOLOS SIN CONTEMPLACIONES y sigamos viviendo en paz, que ni los catalanes son tan malos, ni el resto de españoles somos tan buenos. Lo mismo vale para el resto.

EL DÍA 12 DE OCTUBRE, TODOS A LA PLAZA DE CATALUÑA A REIVINDICAR LA ESPAÑOLIDAD DE CATALUÑA Y LA CATALINIDAD DE ESPAÑA.

Para el que no vive en Cataluña: ¿no tienes ningún familiar o amigo en Cataluña? Para el que vive en Cataluña: ¿No tienes ningún familiar o amigo en el resto del país?

¿Entonces... por qué estamos discutiendo?, ¿vamos a crear fronteras infranqueables para que durante muchos años los padres no puedan ver a sus hijos o viceversa?